Llega un día en que la Princesa Ana tiene que seguir la tradición, tiene que casarse para poder reinar en su país. Sólo hay un problema: ella no quiere casarse con ninguno de los Príncipes de los que han venido a pedir su mano. Ella sólo quiere seguir siendo feliz junto a su mejor amiga, una dulce ranita. Cuando la rana le sugiere que la bese para probar suerte, sorprendentemente, en lugar de un príncipe azul, aparece una hermosa joven. A partir de ahí, tendrán que luchar y demostrar que pueden reinar y hacer felices a su pueblo igualmente, gracias al amor que las une.
