Duración: 90 minutos minutos.
|
Autor: Juan Expósito
Director: Juan Expósito
Elenco:
MarÃa Peñalver
Montse Blanco
Paz Talavera
Rosa Menchén
Sonia Bravo
Santiago Bonacho
Zulima Herrero
Miguel Muñoz
Nani Arroyo
Beatriz Alonso
Avelino RodrÃguez
Diseño de luces: John Doe
Técnico de luces y sonido: John Doe
Audiovisual: Montse Blanco y Santiago Bonacho
Atrezzo y vestuario: ELDP
Cartel: MarÃa Peñalver
Asistente de dirección: Rosa Menchén, Paz Talavera & Montse Blanco
Una producción de El ladrón de patinetes
Sinopsis
Donde crecen las flores es una obra que habla de la complejidad psicológica del ser humano. Todos ven las heridas fÃsicas, los moratones, las piernas rotas… las risas y las lágrimas… Sin embargo, no se ven las heridas del alma, las emociones profundas, los silencios, la soledad, la tristeza que no se deja ver… las depresiones, los trastornos, las decepciones, los dolores internos, los rasguños, las cicatrices y la sangre de la psicologÃa humana. Esta obra es un viaje onÃrico, crudo y profundo por la realidad cotidiana de los personajes de la obra. La vida es alegrÃa y tristeza… lo demás poco cabe en el recuerdo y en esta obra.
Acerca de la obra
La palabra psicologÃa significa literalmente Estudio del alma… La misma Academia de la Lengua lo define como Parte de la filosofÃa que trata del alma, sus facultades y operaciones o como Todo aquello que atañe al espÃritu. Palabras como alma o espÃritu son palabras que en cierta manera nos asustan o, cuanto menos, nos ponen en alerta desde el pragmatismo en el que a la sociedad le gusta analizar los comportamientos menos habituales del ser humano.
Todos conocemos comportamientos del ser humano que no dudamos en calificar de extraños o raros pero que existen y a los que no logramos ponerle lógica. La psicologÃa o el comportamiento de los animales (valga el Ser humano como un animal) es siempre un enigma. Es muy arraigado ese bulo que asegura que no conocemos el 90% del cerebro humano. Falso. Lo que no conocemos es hasta donde puede llegar el comportamiento. El cerebro es un enigma. Un gran enigma. No sabemos hasta dónde podemos llegar cualquiera de nosotros al vivir ciertas situaciones. Nos acomodamos con ciertas posiciones y opiniones creyendo que nos conocemos, en qué harÃa yo en tal situación o en qué es normal y no. Pero no es verdad. El conocimiento del cerebro y sus comportamientos es un planeta aún por conquistar… una galaxia de la cual aún no sabemos lo suficiente.
La psicologÃa aún está estigmatizada en ese sentido. Casi todo está por estudiar y el estudio del comportamiento está en pañales… máxime cuando la psicologÃa cambia con la sociedad… aparecen nuevos trastornos, nuevos conflictos y llegamos a nuevas maneras de actuar en función de los condicionantes sociales. Sin ir más lejos, la actual crisis socio económica que sufre España influye en nuestra psique.
La desesperación, el hambre, la necesidad de justicia o el amor pueden llegar a mover mecanismo en nuestro comportamiento que creÃamos inéditos.
Donde crecen las flores es una obra que se mueve entre la disección de la sociedad actual, la complejidad de la mente humana y el mundo más onÃrico y casi paranormal. Personajes caÃdos, derrotados… crisol de antihéroes que se preguntan por la dignidad, por el amor, por sus miedos y quebrantos. Personajes que se mueven entre lo poético, lo melancólico y lo humorÃstico. La vida es asÃ. Por lo menos lo que queda en la memoria… El gag en mitad de la desgracia y la desgracia en mitad de lo jocoso… En esa miscelánea emocional se mueve nuestra compañÃa porque creemos que el teatro es un espejo del alma… un espejo donde sólo se refleja, en la memoria sublime del arte y del alma, lo más triste y lo más divertido de nuestras vidas.
Agradecimientos y dedicatoria:
Gracias a Marta Rey por inspirarme y por enseñarme de psicologÃa y compartir casos que influyeron en la escritura de esta obra… Por ser musa y profesora. Quiero dedicarle esta obra a Gadea Expósito Rey, a mi padre y a aquellos familiares, paisanos y queridos que perdà y que no quiero nombrar por dolor y respeto y que más que nunca me inspiraron en esta obra: Allá donde estéis recibid el aplauso…