
Águilas en el jardín» es una fábula cargada de ironía sobre los orígenes del mal y una crítica ácida en clave de humor sobre los poderes que dictaminan en dónde hay que buscarlo y cómo atajarlo. La imperfección de la naturaleza humana y las fuerzas, muchas veces incontrolables, que la sustentan no siempre son la causa principal de la desgracia. En muchas ocasiones, esa imperfección se convierte en mal por la falta de comprensión y aceptación, por intentar atajarlas desde lo que el poder, en muchas ocasiones, denomina el bien.
Con esta idea como hilo conductor, el actor Pablo Paz, da vida a seis personajes completamente diferentes que participan en un concurso en el que han de demostrar su valor a la hora de enfrentarse a retos para ellos desconocidos de antemano.
Se trata de una puesta en escena limpia, aderezada con cuatro breves piezas musicales, en la que todo el peso de la acción recae sobre las dotes interpretativas del actor, que ha de cambiar de registro de manera vertiginosa. No se trata de un monólogo al uso, sino de seis personajes representados e individualizados de manera perfectamente creíble por un mismo actor.
Y como en la vida cotidiana, el humor, la tragedia, la ironía, el cinismo o la ternura van tomando cuerpo en un espectáculo en donde la voz y la palabra acaban por llenar un escenario que no necesita de objetos para representar el complejo mundo en el que la acción se desarrolla.